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sábado, 12 de noviembre de 2011
Los griegos y la Atlántida
En el momento de arribar al bello país de los dioses, vacilo. Ante mi, esa tierra sagrada
Extiende sonriendo el resplandor azulado, que durante dos mil años, hizo soñar a mis antepasados
Allí, antaño, se exaltaba un mundo maravilloso. La belleza lo superaba todo, y ataviada la gloria, la asamblea de los héroes se codeaba con el empíreo.
Homero los canto, el nos abría los ojos.
Pero ahora llego yo, con ánimo sacrílego, de las tierras de Osiris, un rey brillante estratega, afirma haber vencido a gentes venidas de aquí.
Su relato los describe como bandidos piojosos, ebrios de sangre y de orgullo, sin piedad ni compasión.
¿Tendré que creerlo? O ¡bien cerrar los ojos!
Jean Deruelle
Libro: El Desafío de los Atlantes
Atributos de Shivá
El tercer ojo: el tercer ojo de Shivá en su frente es el ojo de la sabiduría, conocido como bindi. Es el ojo que ve más allá de lo evidente. En consecuencia a Shivá se lo conoce como Tri-netri-īshwara (‘señor de los tres ojos’). El tercer ojo de Shivá es comúnmente asociado con su energía salvaje que destruye a los malhechores y los pecados.
El collar de la cobra: el dios Shivá está más allá de los poderes de la muerte. Ingirió el veneno kalketu para el bienestar del universo. Para no ser herido por este veneno, se dice que su consorte Parvati ató una cobra a su cuello. Esto retuvo el veneno en su garganta y, por consiguiente, la tornó azul. De ahí su nombre Nīla-kantha (‘garganta azul’). La peligrosa cobra representa a la muerte, que Shivá ha conquistado completamente. Shivá también es conocido como Nageśwara (‘señor de las serpientes’). Las cobras alrededor de su cuello también representan la energía dormida y yaciente, Kundalinī.
Media luna: Shivá lleva en su frente la luna en su quinto día (panchami). Está ubicada cerca del tercer ojo y demuestra el poder del Soma (la ofrenda sacrificial, que representa a la Luna). Significa que Shivá posee el poder de la procreación junto con el poder de la destrucción. La Luna también es una medida de tiempo, por consiguiente también representa su control sobre el tiempo. Shivá entonces es conocido por los nombres de Somasundara (Soma: dios de la Luna; súndara: ‘hermoso’) y Chandrashekara (chandra: ‘luna’; śekhara: ‘corona’). Refiere también al símbolo de su montura, un toro.
Cabello enmarañado (jata): el ondeo de su cabello lo representa como el dios del viento, o Vāyu, que es la forma sutil de aliento presente en todas las formas vivientes. Por consiguiente, es Shivá como la línea vital de todos los seres vivos. Él es Pashupatinath.
El Ganges: el sagrado río fluye desde el cabello de Shivá. El rey Bhagiratha pidió a la madre Ganga que descendiera en este planeta para que purificara sus pecados y los de los humanos. El dios Shivá ofreció su enmarañado cabello para detener su caída desde los planetas celestiales. El flujo del agua es uno de los cinco elementos que componen en universo y desde el cual la Tierra nace. El Ganges también representa fertilidad y el aspecto creativo de Rudra.
El tambor: el sonido del damaru en la mano de Shivá es el origen de la palabra universal que da origen a todo lenguaje y expresión.
Vibhuti: se trata de las tres líneas de ceniza dibujadas en la frente y representa la esencia de nuestro ser, que permanece aún después de los malas (impurezas de la ignorancia, el ego y la acción) y vasanas (gustos y disgustos, apego al cuerpo, al mundo, a la fama, los entretenimientos mundanos, etc.) han sido quemadas en el fuego del conocimiento. El vibhuti es reverenciado como la forma de Shivá y simboliza la inmortalidad del alma y la gloria manifiesta del dios.
Ceniza: Shivá cubre su cuerpo con bhasma (ceniza de crematorio) que señala la filosofía de la vida y la muerte y el hecho de que la muerte es la realidad última de la vida.
Piel de tigre: el tigre es el vehículo de Shakti, la diosa del poder y la fuerza. Shivá está más allá y por encima de cualquier tipo de fuerza. Es el señor de Śakti. La piel de tigre simboliza la victoria sobre toda fuerza. Sentado sobre la misma, Shivá enseña que ha conquistado el deseo.
El elefante y la piel del venado: Shivá también viste con la piel de un elefante. Los elefantes simbolizan el orgullo. Vestir su piel simboliza la conquista del orgullo. Similarmente, el venado simboliza el saltar de la mente, su parpadeo. Vistiendo la piel del venado simboliza que ha controlado la mente a la perfección.
Rudraksha: Shivá viste bandas en sus muñecas de madera de rudraksha (‘ojos de Rudra’), a la que se le atribuye poderes medicinales.
El tridente: el trishula simboliza las tres funciones de la tríada: la creación, el mantenimiento y la destrucción. El tridente en la mano de Shivá indica que todos los tres aspectos están bajo su control. Se dice que la antigua ciudad de Kashi (actual Benarés), queda justo sobre el trishul. Como un arma el tridente representa el instrumento de castigo al malhechor en los tres planos: espiritual, mental y físico. Otra interpretación del tridente es que representa el pasado, el presente y el futuro. El tridente en la mano de Rudra indica su control sobre el tiempo.
Avatares de Shivá
Agni. En el Maha Bhárata se dice que el señor Agni es un avatar de Shivá.
Indra. Se dice que el señor Shivá es el mismo Indra. Los Pauravas son héroes del Rig vedá y su señor era Indra. En el Rig vedá, el señor Indra se llama a sí mismo Shivá en muchas ocasiones (2.20.3, 6.45.17, 8.93.3). Ambos son dioses relacionados con la planta soma.
Jánuman. En el Hanuman chalisa y en el Shivá purāna se dice que Śrī Jánuman (el antropoide devoto del señor Rāma) es una encarnación de Shivá.
Bhairava: otra forma similar al Kali de Durga.
Ardhanaríshwara: ‘mitad Shivá, mitad Parvatī’ (siendo ardha: ‘mitad’, narī: ‘mujer’, femenino de nara ‘hombre’; īshuara: ‘señor’), encarnación combinada de los esposos.
Agastia. Algunos proponen que este rishi (sabio) védico era una encarnación del señor Shivá. Se dice que este rishi inició la veneración de Shivá en el sur de la India.
Durvāsa, un mítico sabio célibe y neurótico, declaraba que no podía controlar su ira debido a que era una encarnación del iracundo Rudra.
Shankar (788-820): maestro que inició la doctrina vedānta (una de las seis dárshanas) y restauró el brahmanismo, contra el pacifismo budista. En varios textos él declaraba ser una encarnación de Shivá (esta forma de autopropaganda es utilizada aún hoy en la India). Aunque Shankar creía en el nirguna Brahman (Dios sin ningún atributo), aun así veneraba a Shivá.
Otras formas de Visnú
Maja-Visnú
Mahā-Visnú (el ‘gran Visnú’) es su aspecto más grande, y el encargado de crear todos los universos. Se acuesta en un lugar del mundo espiritual Vaikunta y su sueño es denominado ioga nidra (‘sueño yóguico’). De su cuerpo emanan (como partículas) los millones de universos materiales.
Mientras duerme, sueña las actividades de todos los seres vivos.
Según la filosofía adwaita, el Brahman impersonal (Dios sin forma ni cualidades) es el origen de todas las formas de Dios. En cambio según los visnuistas, el Brahman es tan solo la refulgencia brahma-yioti (‘divino brillo’) que emana del cuerpo de las formas de Visnú.
Garbhodaka-shai Visnú
Dentro de cada universo materia generado del cuerpo de Mahā Visnú, él se expande y se acuesta en el fondo de cada universo (imaginado como un huevo en cuyo fondo hay un océano). Esa expansión se llama Garbhodaka-shai Visnú.
Kshirodaka-shai Visnú
Los hinduistas creían que la Tierra era plana, y que no era un astro más. En ella había un océano de agua salada, que rodeaba la India, y luego varios océanos concéntricos inalcanzables por los seres humanos: de agua dulce, leche, mantequilla frita, miel, etc.). Hay otra expansión de ‘Visnú acostado en el océano de leche’.
Paramatman
Ese Visnú se expande también para estar presente dentro de cada cuerpo que ocupan la gran cantidad de almas. Se le llama Parama-ātman (‘súper alma’).
Shalágram shilá
Existe una forma de Visnú como deidad, que es una piedra generalmente negra y esférica (en realidad un fósil de amanita), que se denomina shalágram shilá.
Ananta Shesha
La serpiente de mil cabezas Ananta Shesha es una expansión de Visnú como sirviente, para servirse a sí mismo.
Nombres
Como todas las deidades hinduistas, Visnú tiene muchos nombres, quizá más que cualquier otro, recogidos en los Visnú-sajasra-nama (‘Visnú, mil nombres’), que aparecen en el Mahābhárata. Los nombres derivan generalmente de los supuestos an-anta kalyana gunas (‘in-finitos afortunados atributos’) del Señor. Los siguientes son algunos nombres con estatus especial:
Achiuta: ‘infalible’ (a: partícula negativa; chiuta: ‘que puede caer’).
Ananta: infinito (a: partícula negativa; anta: ‘final’).
También se llama así su expansión Ananta Shesha.
Ananta-śayana: que se acuesta sobre la serpiente Ananta.
Antariami: ‘de lo interno, el controlador’
Bhagaván: ‘de las glorias, el poseedor’.
Harí: (proveniente de la raíz sánscrita hrī que significa ‘quitar [el pecado o el sufrimiento]’. De esta expansión de Visnú proviene el nombre de la "Mata Hari" ('la madre Hari'), que era el seudónimo de la bailarina y espía holandesa Margaretha Geertruida Zelle (1876-1917), fusilada por los franceses por espiar para los alemanes.
Jrishīkesh: ‘amo de los sentidos’ (siendo jriśika: ‘sentidos’ e īśá: ‘señor, controlador’).
Hrishīka Nātha: ‘amo de los sentidos’ (siendo jriśika: ‘sentidos’ e nātha: ‘señor’).
Jagannātha: ‘señor del mundo’.
Keshavá: ‘[que posee] cabello hermoso, abundante o largo’.
Mādhava: ‘primaveral’
Majápurusha: ‘gran disfrutador’ (siendo mahā: ‘grande’, y púruṣa: ‘varón’).
Naraianá ‘de los hombres, el refugio’ (siendo nara: ‘hombre’, ayāṇa: ‘refugio’).
Padmanābha: ‘loto-ombligo’. Así se llama a Garbhodakashai Visnú, quien tiene una gigantesca flor de loto que nace de su ombligo. De esa flor nace el Señor Brahmá, creador del universo.
Paramatman: ‘suprema-alma’
Púrusha: ‘varón’ o ‘disfrutador’
Shesha: ‘final’
Vaikuntha Natha: el señor de Vaikunthá (el paraíso espiritual donde vive Visnú y sus devotos).
Visnú: ‘el omnipenetrante’.
viernes, 4 de noviembre de 2011
Tánato / La Muerte
Tánato era el hijo de Nix y vivía en el Tártaro, la oscura región del Hades. Su hermano era Hipnos, el dios del sueño, con el que compartía ciertos atriburos. En Grecia era considerado un dios pero jamás se le dedicó ningún templo ni tuvo nunca sacerdotes, aunque se le consagraban el ciprés y el tejo. Tánato es representado como un esqueleto con un manto negro que porta una espada o una hoz en una mano y una clepsidra, un curioso instrumento para medir el tiempo con el agua, en la mano izquierda.
A su alrededor aparece revoloteando una mariposa como símbolo de la vida futura. En épocas especialmente antiguas Tánato es representado en formas agradables para no despertar malestar entre los contempladores de la obra de arte. Una de las formas más dulces mediante las que se les representó fue como una rosa sobre un féretro.
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